Oscar Escia: Treinta, un tributo a la evolución personal y artística...

Este proyecto nos ofrece una ventana a su evolución tanto personal como artística, abrazando la vida en todas sus facetas: las alegrías, los desafíos y las transiciones. Treinta es la prueba de que la música puede ser un vehículo para navegar los altibajos de la vida, un placer sin culpa que invita a la introspección y el crecimiento...

Cuando los sueños más anhelados se vuelven tangibles, nos enseñan una gran lección: Nunca es demasiado tarde para empezar a trazar tu propio camino. Los sueños son la manifestación del poder de la mente para crear una realidad que, en el fondo, sabemos que podemos alcanzar. En la búsqueda por sentir inspiración y recordar nuestra capacidad de materializar deseos, he conocido a personas que han logrado ir más allá de los límites. Uno de ellos es Oscar Escia, un talentoso comunicólogo y productor musical que ha lanzado su álbum titulado "Treinta".

Este álbum no es sólo una colección de canciones, es una verdadera oda a las personas "vitamina" de su vida: Aquellas que lo han nutrido y acompañado en su viaje personal y profesional. Oscar nos muestra lo importante que es el reto de la creación, las múltiples exploraciones que existen y la certeza de que cada proceso creativo toma su tiempo necesario.

Treinta no ha sido creado con fines comerciales; es en esencia, una carta poética sobre una década de evolución personal y artística. Cada canción del álbum es una historia dedicada a la amistad y a la vida, un reflejo íntimo de sus experiencias. Cada título invita a sumergirse en un mundo propio, donde cada escucha se convierte en una experiencia catártica y transformadora.

Es un tributo a la evolución personal; es mucho más que una simple producción musical: Es una celebración de su alma artística y una demostración del constante cambio que acompaña la transición hacia los 30 años. Una carta abierta a sus amigos, familia y amores pasados; un tributo a las experiencias que lo formaron y a los aprendizajes obtenidos en el proceso. Es el camino hacia la realización de sueños, en medio de crisis y desafíos, pero también de crecimiento y madurez. A través de esta obra musical, Oscar invita a sus oyentes a evolucionar junto con él.

Al definir esta etapa de su vida, Escia comenta: "Es la etapa más interesante de la vida, donde viene lo bueno. Este año fue maravilloso y me ha ido muy bien. He aprendido mucho y he ganado madurez, paz mental y estabilidad. La idea es seguir experimentando la vida para poder seguir componiendo y para eso, tengo que vivir muchas más cosas." Esta filosofía, queda plasmada en las ocho canciones que conforman el álbum, cada una de las cuales debe ser escuchada en el orden establecido, según el artista.

Oscar describe Treinta como un álbum de rap muy humano, con ritmos tranquilos y letras poéticas que reflejan vivencias personales y cotidianas. No es un trabajo comercial; al contrario, es un disco íntimo que busca empatizar con el oyente, sin filtros. "El objetivo es escucharlo conforme al orden y prestarle la atención plena, dejarse llevar, sentir y disfrutar al ritmo de ellas." Detalla Oscar.

Seis meses de esfuerzo y disciplina.

El proceso de realización de Treinta tomó seis meses de trabajo arduo y disciplinado. Oscar pasaba las noches produciendo el álbum, demostrando que la constancia y el esfuerzo son clave para cumplir los sueños. Para él, la música es un arte noble que debe preservar su esencia, sin caer en la superficialidad ni en la presión de hacerse viral. “Lo importante es que se escuche en los oídos correctos”, afirma Oscar, enfatizando que su objetivo no es alcanzar la fama, sino conectar con un público que valore y aprecie el mensaje detrás de su música.

Dentro de este álbum tan personal, Oscar tiene sus canciones favoritas que destacan por su significado especial:

Treinta, la que da título al álbum, captura la esencia misma de esta obra, siendo una reflexión sobre la importancia de abrazar el cambio con madurez y apertura. Esta canción es un viaje introspectivo donde Oscar pone sobre la mesa los aprendizajes y retos que los 30 años le han traído.

Rapsito de Día es una canción más ligera y fresca, un tributo a los pequeños momentos cotidianos. En esta pieza, Oscar muestra su lado más relajado, donde la sencillez de las experiencias diarias cobra una profundidad inesperada. La canción transmite una vibra tranquila, invitando a disfrutar del presente con calma y apreciación.

Cada canción de Treinta es una historia empática y catártica, basada en las experiencias y situaciones que han marcado la vida del artista. El álbum refleja una evolución personal que se plasma en cada nota, cada letra. Oscar se siente profundamente satisfecho al ver su sueño convertido en una realidad tangible, y valora especialmente los comentarios positivos de su círculo cercano. “No por ego ni superficialidad”, dice, “sino más desde el corazón. Me importa contribuir de forma positiva a quienes me rodean y su feedback es lo que más valoro.”

La música como vehículo de empatía y conexión.

El propósito principal de Treinta es crear una conexión emocional con su audiencia. Oscar se asegura de que sus letras transmitan responsabilidad afectiva, empatía y buena vibra. “Este álbum está hecho con la intención de tratar los sentimientos de las personas con respeto y congruencia”, comenta. Para él, la verdadera satisfacción es saber que su música puede ayudar a alguien a relajarse, a dejar de preocuparse por un momento y a bajar la intensidad de la vida cotidiana. Si logra inspirar a alguien a seguir sus pasiones, sin importar la edad, considera que ha cumplido uno de los grandes objetivos del disco.

Cada canción es un retrato de las emociones que surgen a lo largo de la vida, especialmente en esta etapa tan crucial. Treinta es una obra que abraza el proceso de madurar, de superar obstáculos y de disfrutar el viaje. Es un álbum estable, coqueto, fresco y divertido en su concepto, a la vez profundo y reflexivo. El autor no sólo se muestra fiel a su estilo, sino que también renueva su enfoque musical al no querer encasillarse en un sólo género, explorando nuevas sonoridades.

Este proyecto nos ofrece una ventana a su evolución tanto personal como artística, abrazando la vida en todas sus facetas: las alegrías, los desafíos y las transiciones. Treinta es la prueba de que la música puede ser un vehículo para navegar los altibajos de la vida, un placer sin culpa que invita a la introspección y el crecimiento.

Este álbum de ocho canciones es una invitación a vivir el presente, con espontaneidad y respeto. Cada tema refleja no solo la evolución como músico, sino también su deseo de aportar algo positivo a la vida de quienes lo escuchan. A lo largo de Treinta, se percibe una búsqueda constante de equilibrio, autenticidad y la satisfacción de haber creado algo profundamente personal, sin dejarse llevar por las tendencias comerciales.Oscar Escia no solo abraza su proceso artístico, sino que también se lo ofrece a su audiencia como un ejemplo de cómo se puede vivir la vida: con pasión, inspiración, dedicación y fidelidad a uno mismo.

KVO